Si ser productivo es realmente importante para usted, plantéese si está dispuesto a hacer lo necesario para lograrlo. Debe diseñar entonces un estilo de trabajo placentero y productivo, y adoptar un estilo de vida para acomodar sus opciones.
La habilidad de trabajar más rápido y hacer más en menos tiempo es sinónimo de libertad.
Cada día, usted tiene que lidiar irremediablemente con determinada cantidad de trabajo. Si logra ser más eficiente, podrá terminar su trabajo, y todavía tener tiempo libre para leer un libro, jugar con sus hijos, hacer ejercicios, tocar piano, etc.
Algunos consejos prácticos que podrán ayudarlo
– Deshágase de cualquier pensamiento perfeccionista.
– Deje de realizar varias tareas diferentes a la vez.
– Deje de perder tiempo en proyectos que oficialmente aún no tiene.
– Establezca fechas tope realistas: no se comprometa a cumplir cuando sepa que tendrá dificultades para hacerlo.
– Proteja y valore su tiempo: manténgase concentrado, propón- gase metas y sobre todas las cosas, trabaje en lo que le guste.
No olvide el viejo proverbio escocés: “sea feliz mientras esté vivo, porque luego va a pasar mucho tiempo muerto”.
– Evite los desgastes de energía: si usted trabaja duro por un largo tiempo sin descansos, terminará cansado, sin energía, sintiéndose aburrido, y hasta deprimido.
– Hágase su propio ritmo: varíe sus tareas y tome pequeños descansos con frecuencia.
– Trabaje con todo su potencial: un posible desgaste de energía puede surgir si tiene asignadas tareas tediosas o poco reta- doras. Pida más trabajo, más retos; búsquese un trabajo com- pletamente diferente o pida hacer actividades diferentes.
– Busque algo nuevo: puede energizarse mediante el aprendizaje de algo nuevo, haciendo algo nuevo, reestructurando su trabajo, o convirtiéndose en una persona más activa en su área profesional.
– No amontone basura: revise sus papeles periódicamente, ar- chive lo que necesita y bote lo que ya no le sirva.
– Tenga un calendario a la mano: para anotar sus citas y fechas importantes.
– Mantenga limpio su escritorio: un escritorio desordenado es un gran impedimento para la productividad.
– Mantenga listas de prioridades: actualícelas en el tiempo.
– Aprenda a decir no: usted no puede hacerlo todo. No debe sentirse culpable por decir no. Sea educado, pero sea claro con las cosas que no está dispuesto a pasar tiempo haciendo.
– Sea realista: no caiga en la tentación de aceptar “una cosita más”. Esta tarea adicional puede traer consecuencias impredecibles.
Aprenda a reducir el efecto de la sobrecarga:
- Limite sus fuentes de información.
- No lea todo lo que encuentre. Trate de “pre-leer”·y sele- ccionar antes de hacerlo.
- Elimine la información basura (chismes, etc.)
- Utilice servicios de noticias e información a la medida.
- Reduzca su volumen de correo electrónico.
- Limpie las fuentes de información a menudo, tales como ar- chivos de papel, archivos electrónicos, manuales de referencia, etc. Deshágase de lo que no necesite.
- Aprenda a reconocer cuando tiene suficiente información.
Y Usted ¿cómo se siente, cree que podría mejorar este aspecto?
0 Comments